La plataforma de Mujeres Artistas Rurales llena de arte y cultura el pueblo de Magallón

Mujeres artistas y artesanas de todo el territorio aragonés se dieron cita el pasado sábado, 21 de mayo, en la localidad zaragozana de Magallón, en el II MAR Festival. Se trata de la segunda edición de este encuentro multidisciplinar organizado por la plataforma MAR – Mujeres Artistas Rurales, un proyecto de la Asociación ARTmósfera, organizadora del evento en colaboración con la comarca Campo de Borja, el Ayuntamiento de Magallón, el Instituto Aragonés de la Mujer y Proyecto Concilia.

Además del apoyo financiero de las entidades arriba mencionadas, la Plataforma MAR ha contado con una ayuda del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), del Ministerio de Cultura y Deporte y de la Unión Europea (Fondos Next Generation EU) a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que se ha destinado a la grabación y edición del video promocional del festival y de las actuaciones de las artistas escénicas y musicales programadas, cuyos videos han sido puestos a disposición de las artistas para que puedan utilizarlos en sus dosieres, teasers y portfolios.

Las actividades del MAR Festival no cesaron durante el día a pesar del intenso calor. Todas ellas con las integrantes de la plataforma –mujeres artistas rurales de Aragón– como protagonistas: talleres de distintas disciplinas artísticas y para todas las edades, mercado artesanal, teatro, espectáculo de clown, muestra audiovisual, una exposición colectiva y mucha música. De un extremo a otro del pueblo, y en distintos espacios, desde el Cine Marina hasta el Auditorio Ramón Salvador; el talento de las mujeres rurales invadió Magallón.

La jornada empezó con un acto de presentación a cargo del alcalde de la localidad, Víctor Manuel Chueca, y Marta Gimeno, coordinadora de la plataforma MAR, quien aprovechó para reivindicar el papel de la cultura. Gimeno pidió “mayor implicación con la cultura, con el medio rural y con las mujeres”, ya que, aseguró, “se necesitan más recursos, más financiación y más servicios”, condiciones que “hay que seguir luchando y peleando sin reblar”.

Sin ir más lejos, la programación del II MAR Festival se vio reducida por la disminución de presupuesto, aunque eso no afectó a la calidad de las propuestas programadas.

Marta Gimeno, coordinadora de MAR, durante el acto de presentación. DAFNE GISBERT

Éxito de convocatoria en los talleres

A las 11:30 dieron comienzo los primeros talleres. El de tejeduría creativa, con la artista María de la P., se prolongó durante toda la mañana y culminó con la colocación del tapiz colectivo en la escultura dedicada a la mujer magallonera, obra de Marta Soto Paciencia, artista y también integrante de MAR, que participó en la exposición colectiva.

Los talleres de cuentacuentos y pintura con Lolín Casanova y de fantástica con María Rubio Tobalina congregaron a una quincena de niñas y niños, cumpliendo el cupo de inscripciones ofertado para dichas actividades. Lo mismo ocurrió con el taller ‘A tijeretazo limpio’ de Noemí Calvo.

Con gran acogida se celebró también un taller de pintura naturalista en la zona más alta del pueblo, impartido por Esther Charles, artista y educadora ambiental. 

Participantes durante el taller de pintura naturalista de Esther Charles.

La muestra audiovisual contó con dos pases. Por la mañana, el Cine Marina acogió el corto de Sara Cinca, Manjhatan, una reflexión en plano secuencia sobre la violencia sexual, y Pueblo que baila, pueblo que está vivo, un documental de Elena Cantero para el Ayuntamiento de Allepuz en el que voces muy diversas narran la realidad de la despoblación en este pueblo de Teruel. Ambas creadoras ofrecieron un coloquio con las y los asistentes, al igual que lo hizo, en el pase de la tarde, Susan Labich, autora de Rebeldía Rural. Este documental aborda la forma de vida de una familia dedicada a la agroecología y la ganadería extensiva en el Sobrarbe. La pieza consiguió emocionar a quienes asistieron a la proyección por la belleza de sus imágenes y la inspiración que trasmiten sus protagonistas, acompañadas por las míticas canciones de la Ronda de Boltaña.

Durante esta sesión se proyectó también la obra Ez utzi inork zure burua menperatzea de la turolense Andrea Tolosa Cotoré, un proyecto de videoarte creado en el Centro de Arte y Tecnología de Zaragoza ETOPIA durante 2018.

Coloquio con las autoras de ‘Manjathan’ y ‘Pueblo que baila, pueblo que está vivo’ durante la sesión matinal de la muestra audiovisual.

Mientras tanto, en las calles de Magallón no paró la música y el espectáculo: desde el show de clown de Raquel Renieblas a la jam musical, en la que participaron Trío Nirvelli, Espacio Profundo y Vanesa Celiméndiz. Ya por la tarde, DJ Luna Roja amenizó la zona del mercadillo con una sesión de música de mujeres referentes a lo largo de la historia que se alargó de forma improvisada y regresó por la noche, tras el concierto de los turiasonses CloisterOut en la Plaza España.

Raquel Renieblas durante su espectáculo de clown.

La bajada de la temperatura durante la tarde hizo aumentar tanto el ambiente como la afluencia de gente en el festival, que en total congregó a un número similar de asistentes respecto a la primera edición, celebrada en Castelflorite en 2021 y que reunió a unas 600 personas.

La parada de bodypainting de la artista Arzu Su fue el lugar favorito de los más pequeños, y el Auditorio Ramón Salvador se convirtió en uno de los espacios más sorprendentes de este II MAR Festival: esta antigua iglesia mudéjar recuperada albergó la obra de teatro Os habéis dejado la puerta abierta, de la Cía. Las Delirio, y la jam de poesía.

Función de teatro en el Auditorio Ramón Salvador.

Además de Marta Soto Paciencia, otras artistas de Magallón participaron de una u otra forma en la jornada. Es el caso de la artesana Paula Jiménez Yera, que realiza joyería contemporánea. 

La Asociación de Mujeres “Villa de Magallón” fue la sede de la exposición colectiva, con obras de Esther Charles, Beatriz Bertolín, Marta Soto Paciencia, Irene Val, María de la P., Lolín Casanova, Celia Hoyos y Estefanía Aldea.

Obras de Irene Val en la exposición colectiva.

Un paso más en la consolidación de un proyecto pionero

La plataforma MAR – Mujeres Artistas Rurales sigue creciendo. Prueba de ello es que ya son más de 300 las mujeres que forman parte de esta red de creadoras.

El II MAR Festival es un paso más para consolidar este proyecto, que cuenta con poco más de un año de vida. MAR nació en febrero de 2021 en manos de la Asociación ARTmósfera con el objetivo de cuantificar, identificar, visibilizar e interconectar a las artistas y artesanas que viven y trabajan en el medio rural aragonés. Se trata de una iniciativa pionera no solo en Aragón sino también a nivel nacional. 

La plataforma está dirigida a mujeres artistas (mayores de edad) que residen y trabajan en el medio rural aragonés y abarca un sinfín de disciplinas artísticas y creativas (artes aplicadas, artes plásticas, textiles, gráficas, literarias, artes visuales, escénicas, musicales, etc.).

En noviembre de 2021, MAR fue seleccionado por Fundación la Caixa en su convocatoria Acción Social en el Ámbito Rural, recibiendo una ayuda que está permitiendo extender la búsqueda de artistas y artesanas rurales a todo el territorio aragonés a lo largo de 2022, alcanzado así a las creadoras rurales de las treinta y tres comarcas de Aragón.

El II MAR Festival ha salido adelante con el apoyo del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), proyecto Concilia, Ayuntamiento de Magallón y Comarca Campo de Borja