Las creadoras rurales de Aragón toman Alcampell para vindicar su trabajo y reclamar mayor apoyo a la cultura local

Las calles y plazas de Alcampell se fueron llenando de gente desde primera hora de la mañana del sábado 14 de octubre; personas que, con su presencia, quisieron apoyar y respaldar el trabajo de las artistas y artesanas que integran la Plataforma MAR – Mujeres Artistas Rurales. Las coordinadoras del proyecto, Berta Gascón y Marta Gimeno, aprovecharon el acto inaugural para pedir mayor compromiso con las creadoras rurales, ya que a su entender todas ellas vienen enfrentando una triple discriminación: como mujeres, como artistas y como vecinas del medio rural.

Vecinas y vecinos de Alcampell y otros municipios arropando a las coordinadoras de la Plataforma MAR tras el acto inaugural del IV MAR Festival. Foto: María Mateo.

A las 11:30 horas arrancaron las primeras actividades: el mercado artesanal, en el que participaron una veintena de artesanas venidas desde distintos puntos de Aragón, y la exposición colectiva, que incluía variedad de propuestas y formatos; desde videoinstalaciones y fotografía, a ilustración, collage, arte abstracto o acuarela. Un total de nueve artistas expusieron en la muestra: Laura Medina y Espacio Profundo con Cendra; Ene de Nadia con Montañas oníricas; Nerea Mur, artífice de la gráfica del MAR Festival de este año; Pilar Barrabés, del Colectivo Arte Monzón; Beatriz Frago; Arunee Vasanserekul; Mariona Martínez y Nylon Silvestre.

La Casa de la Cultura de Alcampell acogió la exposición multidisciplinar del IV MAR Festival en la que participaron nueve integrantes de la Plataforma MAR. Foto: María Mateo.

Éxito de participación en los cuatro talleres programados, cuyas inscripciones se agotaron en cuestión de minutos. Abarrotado el taller de Modelado de Barro, que impartió la artesana Carmen Igual, de Cerámica VIllarubei, venida desde Villarroya de los Pinares, en la comarca del Maestrazgo. Repletos también el de Hula Hoop, ofrecido por Natalia Oliveros de Artieda (Cinco Villas), y el de Origami, organizado por la artista tailandesa Arunee Vasanserekul afincada en Binéfar desde hace dos décadas.

Aforo completo en el taller de modelado de barro impartido por la artesana turolense Carmen Igual, de Cerámica Villarrubei, que acudió desde el Maestrazgo. Foto: María Mateo.

Mención a parte, el taller de pirograbado y macramé impartido por Inés Castán (Cuerdas Locas) y Erica Urdeitx (Creaciones la Luna), que llegaron desde Bailo y la Peña Estación respectivamente. Dos jóvenes artesanas que se conocieron a través de la Plataforma MAR y que desde entonces, se han lanzado a impartir talleres juntas.

Taller de iniciación al macramé y pirograbado impartido por Inés Castán (Cuerdas Locas) y Erica Urdeitx (Creaciones La Luna) en las Escuelas municipales de Alcampell. Foto: María Mateo.

Aunque el festival comenzó el sábado, en la tarde del viernes, ya empezaron a circular las y los curiosos por la explanada de la calle La Fuente de Alcampell atraídos por el mural en vivo que empezaban a bocetar las artistas Nylon SIlvestre y Mente Absurder. Una
intervención artística que dejó por escrito un mensaje muy claro: “la tierra no es vuestra y nuestros cuerpos tampoco” y que salió adelante con el apoyo de la empresa binefarense Pinturas Lepanto, que cedió las pinturas al colectivo de artistas rurales.

La artista Celia Hoyos (Mente Absurder) trabajando en el mural de la calle la Fuente de Alcampell. Foto: María Mateo.

Conciertos, charlas y espectáculos abarrotados

Centenares de personas se congregaron al mediodía en las inmediaciones de la Plaza Mayor de Alcampell para asistir al concierto de La Corral. Una formación musical surgida un 8M e integrada por cinco mujeres que interpretaron con muchísimo arte y naturalidad canciones propias y de terceras rescatadas con tiento de repertorios tradicionales.

Concierto de La Corral en la Plaza Mayor de Alcampell. Foto: María Mateo.

También en la Plaza Mayor pudo verse al mediodía el espectáculo infantil Mi amigo el dragón, de la compañía zaragozana Títeres sin Cabeza que hizo estallar al público en carcajadas y aplausos.

Fragmento de “Mi amigo el Dragón”, espectáculo familiar de la compañía zaragozana Títeres sin Cabeza. Foto: María Mateo.

La tarde se repartió entre talleres, recitales y espectáculos de circo y artes escénicas. La primera en actuar fue la solista y pianista Riba Soul que ofreció un bonito recital en la ermita Sta. Margarita de Alcampell.

Taller sobre plantas medicinales de nuestro entorno realizado por Paula Oliva (Medicina para el Alma) en la ermita Sta. Margarita de Alcampell. Foto: María Mateo.

Tras ella, llegó el turno de la varieté escénica, sin duda, una de las intervenciones más esperadas en los MAR Festivales. Una propuesta creada ex profeso para la ocasión y que reunió en un mismo escenario a seis artistas de muy diversas disciplinas: María Resa (Telas Aéreas), Ángela Escribano (Hula Hoop), María Sancho (Teatro), Cía. Tintilaina (Aros Aéreos, Acrobacia en Suelo y Teatro Gestual) y Meraki (Malabares de Fuego).

La artista turolense María Sancho (Cía. Dos Espíritus Teatro), fue la encargada de conducir la varieté del IV MAR Festival. Foto: María Mateo.

Caía ya la noche cuando irrumpieron en escena Las Liantas con su Bingo Musical, una propuesta divertidísima y participativa para poner patas arriba canciones de toda la vida y darle una nueva lectura feminista, reivindicativa y sin tabués.

Fragmento del “Bingo Musical” de Las Liantas, que tuvo lugar en el pabellón de Alcampell. Foto: María Mateo.

Como broche final del MAR Festival, el concierto de Las Guindillas con su carismático y ya mítico ruido rural prepirenaico y la sesión de cierre de Dj Luna Roja que se extendió hasta bien entrada la madrugada.

Concierto de Las Guindillas en el patio de las Escuelas de Alcampell. Foto: María Mateo.

Un festival rural, itinerante e intergeneracional

Esta ha sido la segunda vez que el MAR Festival recala en la provincia de Huesca, tras haber pasado por los municipios de Castelflorite (Huesca), Magallón (Zaragoza) y Cantavieja (Teruel). Un festival itinerante e intergeneracional, realizado exclusivamente por mujeres y con propuestas e intervenciones artísticas gestadas en los propios núcleos rurales. La IV edición del MAR Festival ha contado con el apoyo de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), el Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), la Comarca de La Litera, el Ayuntamiento de Alcampell y con las vecinas y vecinos de este pequeño municipio oscense que trabajaron incansablemente para que el MAR Festival
saliese adelante.

Representantes del Ayto. de Alcampell, Comarca de La Litera, Asociación ARTmosfera y de Plataforma MAR, tras el acto inaugural del IV MAR Festival. Foto: María Mateo.

Detrás de está iniciativa están la Plataforma MAR y la Asociación ARTmosfera, que esta misma semana han recogido en Madrid, el tercer Premio de Excelencia a la Innovación para Mujeres Rurales, otorgado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, por visibilizar, respaldar e impulsar el trabajo de las artistas y artesanas rurales de Aragón. El proyecto MAR – Mujeres Artistas Rurales nació en febrero de 2021 con el objetivo de identificar y ubicar geográficamente al conjunto de artistas y artesanas que trabajan y residen en el medio rural aragonés, y confeccionar un mapa para poder localizarlas y contactarlas, incentivando así las sinergias y contrataciones de creadoras locales.

En este tiempo, además de cartografiar el territorio y poner rostro y pueblo a más de trescientas artistas y artesanas rurales a través de su página web mujeresartistasrurales.es, han organizado tres festivales multidisciplinares y ejercido intervención directa con las integrantes de la plataforma, facilitándoles capacitaciones y formaciones para mejorar sus competencias. En la actualidad forman parte de esta red, 318 creadoras de las tres provincias aragonesas.